Abinader ni se cansa, ni lo cansan: trabaja sin día libre, sin pausa y a toda prisa

Ni las lluvias, ni los niveles de alertas de las últimas semanas impidieron al presidente Luis Abinader mantener invariable su ritmo de actividades diarias, agotando 22 actividades oficiales en los últimos 14 días, sin incluir su agenda privada.

Estas actividades se desarrollaron en el Gran Santo Domingo y distintas provincias del país, reflejando un ritmo sostenido de gestión que combina inauguraciones, reuniones de seguimiento, actos institucionales y visitas a comunidades, incluso en medio de las lluvias provocadas por la tormenta tropical Melissa.

Y es que el presidente Abinader se ha tomado muy en serio su trabajo a tal punto que solo tomó días libres del 25 al 30 de diciembre del pasado año, cuando viajó, en compañía de su familia, a Estados Unidos, atendiendo compromisos personales durante las festividades navideñas. Lo mismo hizo para el año 2023.

Desde el lunes 20 de octubre hasta el domingo 2 de noviembre de 2025, Abinader encabezó actos en el Gran Santo Domingo y en al menos nueve provincias del país, incluyendo Puerto Plata, San José de Ocoa, Barahona, San Juan, Duarte, El Seibo, Pedernales, La Vega y Monte Plata.

Solo el fin de semana, el primero y el 2 de noviembre, el mandatario cumplió once actividades distribuidas entre San Juan y San Francisco de Macorís, incluyendo inauguraciones de carreteras, hospitales, obras comunitarias y zonas francas.

UN PROMEDIO DE 11 ACTIVIDADES POR SEMANA

El análisis del registro oficial de la Presidencia indica que Abinader promedió 11 actividades por semana, con jornadas que inician desde las 9:00 de la mañana y, en ocasiones, se extienden hasta las 8:00 de la noche.

A diferencia de semanas previas, marcadas por reuniones institucionales, estas dos incluyeron una mezcla de actos públicos, inauguraciones de infraestructura, encuentros con la prensa, supervisiones y coordinaciones ante los efectos de la tormenta tropical Melissa.

Durante el paso del fenómeno atmosférico, el mandatario encabezó al menos cuatro reuniones con el Centro de Operaciones de Emergencias (COE), Obras Públicas, alcaldías y organismos de socorro, dando seguimiento al fenómeno atmosférico.

De las 22 actividades verificadas, 12 se realizaron en Santo Domingo, lo que representa un 54 % del total. Estos encuentros se desarrollaron principalmente en el Palacio Nacional, el Banco Central, el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Hotel Barceló Santo Domingo, donde el mandatario asistió al aniversario de la Federación Dominicana de Comerciantes.

Las otras 10 actividades fueron fuera de la capital, con una agenda enfocada en la supervisión de obras y contacto directo con comunidades. Entre ellas destacan la inauguración del Hotel Meliá Bergantín en Puerto Plata, la carretera Vallejuelo–Batista en San Juan, la planta de tratamiento de Pimentel y el hospital regional Ángel María Gatón en San Francisco de Macorís.

Los días más activos: viernes, sábado y domingo

El conteo semanal muestra que los días viernes, sábado y domingo concentran la mayor cantidad de actividades, un patrón que se ha repetido en otras etapas de su gestión.

Solo el sábado 1 de noviembre, Abinader agotó siete actos consecutivos en San Juan, entre ellos almuerzos con estudiantes, visitas a proyectos agrícolas e inauguraciones de infraestructura.

El domingo 2 de noviembre también mantuvo una jornada extensa con cuatro actos oficiales en la provincia Duarte, sin interrupción.

A pesar de que gran parte del país estuvo bajo lluvias durante el paso de la tormenta tropical Melissa, el presidente Luis Abinader mantuvo su agenda de trabajo sin interrupciones. En medio de las alertas meteorológicas, el mandatario continuó encabezando reuniones, inauguraciones y actos oficiales, combinando la coordinación de las labores de emergencia con sus compromisos programados en distintas provincias.

Durante esas jornadas, Abinader se desplazó por el interior del país y también presidió encuentros en el Palacio Nacional, lo que evidenció su decisión de no suspender actividades aun en condiciones climáticas adversas.